Los aztecas llaman al suelo: Tlaltecuhtli. Lo consideran Dual: femenino y masculino. Como mujer es paridora, como hombre es devorador de vida. Tlaltecuhtli devora a los muertos, que pasan a su matriz para ser paridos en el lugar que les depare el destino. Tiene esa función dual, devorar y parir. Las esculturas alusivas a Tlaltecuhtli eran depositadas de espaldas o boca abajo, sobre todo cuando era trabajada en grandes bloques, o si aparecía en vasijas ocupaba el lugar inferior, porque por su esencia está al ras de tierra.
Hasta el momento se conocen más de 40 representaciones de Tlaltecuhtli, siendo una de las más acentuadas la zoomorfa en la que aparece con la boca abierta y colmillos, piernas levantadas, cuatro garras y en todas las coyunturas lleva consigo una especie de máscara en forma de cráneo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario